Lo que no tiene sentido es que, en viaje de tránsito, se cobre una conexión fortuita como si se estuvieran usando los datos como cuando ves una serie de NETFLIX. De hecho, no imagino a los maquinistas de la línea que pasa por Mónaco desde la frontera de Italia con Francia, y viceversa, cambiando su móvil y quitando la itinerancia cada vez que hagan ese trayecto y pasen por Mónaco para que Orange Francia no les cobre el roaming de zona 2. Porque seguramente, los maquinistas de esa línea sean franceses y no monegascos. Y seguramente la compañía telefónica en Francia ya haya previsto esta incidencia que, durante un trayecto así, puede ser casi inevitable.
Y tampoco es de recibo pasar el cargo completo de 20 euros por una conexión fortuita de menos de 2 GB, que no se corresponde ni de lejos con un uso voluntario o buscado de los datos, como cuando estás un país extranjero de vacaciones y sí usas los datos; en los consumos se ve perfectamente el tipo de uso que se hace de los datos. Las compañías deberían tener esto en cuenta cuando sucede, porque no todos los casos son iguales ni se justifica el cobro del servicio. Respecto a Consumo, lo mínimo que precisamente pueden considerar es una reclamación por precio abusivo de un servicio, como también resulta en este caso. Y, por último, lo que consigue Orange con esta actitud tan inflexible y poco condescendiente es que los clientes (encima de llevar muchos años y pagando tarifas de las más altas) se piensen cambiar de compañía, que es lo que me estoy planteando yo, en vistas de que no son capaces o no quieren entender la excepcionalidad de estas situaciones ni tener deferencia con los clientes.
