Fornite es uno de los juegos que más lo peta. Y también uno de los que más está dando que hablar, tanto para bien como para mal. Su aspecto de dibujos animados, que no se vea rastro de sangre a pesar de sus violentos combates y su sencillo argumento, le hace atractivo hasta para los niños, aunque está catalogado para mayores de 13 años. Y esta popularidad hace que haya opiniones en favor y en contra de él.
“Si no puedes con el enemigo, únete a él” eso debió pensar un profesor de un instituto de Nueva York que, al ver que algunos de sus alumnos más conflictivos estaban más interesados en Fornite que en sus clases, decidió motivarles jugando una partida con ellos a cambio de que hicieran un trabajo. Partida que, como informan desde Nintenderos o Vandal, le costó su puesto de trabajo y la revocación de su licencia como profesor.
Mientras algunos padres ven la conducta del profesor “apropiada y motivacional”, otros no entendieron su comportamiento, lo que les llevó a hablar con el director, que acabó echándole. Ahora Belsky ha puesto una demanda judicial para recuperar su licencia y su trabajo, ya que para él no hubo ningún comportamiento inapropiado, ni dentro ni fuera del aula. Fue correcto el comportamiento del profesor?? Jugar a un videojuego en clase para motivar a los alumnos, está bien o debería haberles motivado de otra manera??
El caso es que Fortnite está causando algún que otro problema entre los más jóvenes como el de la niña británica de 9 años o la preocupación en diversos colegios por una bajada en el rendimiento de sus alumnos. Son casos aislados?? Creéis que habría que preocuparse??
La polémica está servida. Mientras que unos lo ven como un peligro otros lo hacen como una oportunidad. Cualquier exceso puede ser perjudicial, por eso la clave es disfrutar sin llegar a la obsesión. Dónde está el límite entre el “abuso del juego” o la adicción a él?? Uníos a #jointhegame y contadnos vuestras opiniones!!
