Tal y como se titula esta entrada, se va a liar y mucho. ¿Qué te pasa, Google? ¿Dónde has dejado la protección de datos de las personas? Esta vez se te ha ido de las manos y la has liado parda.
Texas, en concreto su fiscalía, ha presentado una demanda contra Google por una recogida de datos biométricos de ciudadanos de dicho estado para servir anuncios de la red publicitaria de la firma tecnológica. Todo esto presuntamente...
¿Qué ha pasado exactamente? Según el comunicado que ha ofrecido, Google habría recogido rostros y voces de los usuarios residentes en Texas a través de productos y aplicaciones para servir publicidad. Una información que habría empleado sin haber obtenido el consentimiento previo de estas personas.
Esta nueva demanda contra Google se produce mientras que Estados Unidos se encuentra desarrollando su norma de privacidad, la Ley de Protección y Privacidad de Datos Americana (ADPPA), que regularía la recogida y uso de los datos de los usuarios por parte de las organizaciones en el terreno digital. Entre los aspectos que recogía la norma aprobada el pasado julio por el Comité de Comercio y Energía del Congreso, se establecía como requisito básico la recogida y uso de datos de los estrictamente necesarios y de forma proporcionada y limitada, además de protecciones especiales para ciertos tipos de información, como los datos de geolocalización, los biométricos o las imágenes íntimas no consensuadas. Aunque hemos de decir que Google no es la única en enfrentarse a una acusación similar. En 2021, sin ir más lejos, Apple se enfrentó al mismo tipo de acusación.
