Si hablamos del gasto de luz… dirás que no está el horno para bollos. Pero te traemos una idea: la energía solar. No produce dióxido de carbono en el proceso, por lo que es positiva para afrontar la crisis climática y su uso supone un abaratamiento del coste de la energía en los momentos del día en que hay sol. Justo esos en los que más ha subido el precio del kilovatio.
La instalación conlleva trámites legales que pueden alargarla, como comentan en el portal Adsl Zone, porque por lo general hay trámites antes de la instalación y después de la misma. Se realiza un diseño de la instalación por un profesional cualificado que debe redactar una memoria técnica que tenga en cuenta la normativa vigente, luego del diseño, se deben solicitar los permisos de acceso y conexión a la empresa distribuidora, y por último, será necesaria una licencia de obra en algunos casos, pero siempre habrá que realizar la comunicación.
Las modalidades de autoconsumo son dos: la que vierte los excedentes a la red eléctrica y la que no. La primera es más compleja porque precisa de mayor documentación, a diferencia de la que no da excedentes, el contrapunto positivo es que los excedentes pueden contrarrestar los costes de consumo derivados de esos momentos en que no hay sol, como por la noche o los días nublados.
Existen tres tipos de placas solares: las fotovoltaicas, las eléctricas y las híbridas. Las fotovoltaicas se encargan de transformar la energía solar en electricidad, mientras que la térmica la transforma en calor, que es usado para calentar el hogar y/o el agua. Las híbridas combinan ambas tecnologías produciendo calor al mismo tiempo que electricidad.
El precio depende de muchos factores que hay que tener en cuenta previamente, como la potencia pico, el tamaño de la instalación, su complejidad y la calidad de los componentes fotovoltaicos. Además, conforme más energía sea necesaria mayor tendrá que ser el tamaño de las placas solares y su coste.
Si bien es cierto que la energía solar es una solución para abaratar los costes de las familias, la realidad es que el precio de las placas y la instalación son prohibitivos (sobre 6000€) para aquellos hogares a los que les podría beneficiar en este sentido, la industria del autoconsumo se dirige principalmente a personas de clase social media alta que buscan reducir su impacto medioambiental. ¿Será el autoconsumo el futuro de la generación de electricidad? ¿Se alcanzará en esta década la neutralidad de carbono?
Asunto | Autor |
---|---|
¿No encontraste lo que buscabas?