¿Quién no recuerda “El príncipe de Bel-Air”? La popular serie de Will Smith hizo que esta ciudad de Los Ángeles alcanzara la fama. Hoy, la retoma por otros motivos: en sus dominios se encuentra la casa más cara de Estados Unidos. No es apta para todos los bolsillos, pero lanza pistas sobre el futuro de los hogares.
Nada menos que 295 millones de dólares es lo que cuesta hacerse con esta villa, situada en lo alto de una colina. Pero los 9.700 m2 de “The One” no son su clave, estamos ante la reina de la domótica. Tal es el nivel avanzado de la electrónica en esta “humilde morada”, que cuenta con su propia sala de servidores en el corazón de la vivienda, una sala acristalada junto a uno de sus salones. Lo describen en Xataka.
Techos de 8 metros de altura, una terraza kilométrica, 21 habitaciones y más de 40 baños… La casa más cara de Estados Unidos cuenta con más de lo que un ser humano necesita y da pistas sobre cómo será el hogar inteligente del futuro: “Este es el cerebro. Se gastaron tanto dinero en él y ocupa tanto espacio que quisieron hacer de él una especie de sala de exposición. Por esa razón tiene esta pared de vidrio”, cuenta el youtuber Enes Yilmazer, que ha mostrado esta maravilla en su canal.
¿Hasta qué punto esta sala acristalada es necesaria? Nada en esta residencia funcionaría sin esta enorme habitación, que controla grandes electrodomésticos interconectados, iluminación inteligente, pantallas, iPads situados allá donde mires… Desde luego el dominio de la tecnología Led es total en la colosal vivienda. ¡A Tu Experto le encantaría asistir a sus inquilinos!
¿Sabes que esta casa ha sido ideada por un productor de cine? De la mano de Nile Niami, profesional del séptimo arte reconvertido en promotor inmobiliario, no es de extrañar que sea una casa de película. Aunque la ciencia ficción ha desencadenado en un drama por resolver: ya ha sufrido una importante rebaja y ahora el propio Niami ha propuesto a inversores crear "The One Coin", una criptomoneda amparada por el valor de la mansión. Así, “tokenizan” la casa, que encontraría rentabilidad alquilándose para bodas y eventos.
El futuro de la domótica, ¿pasa por mostrar su poder en lugar de esconderlo a la vista? ¿Dependerá del dinero virtual? Desde luego, la mansión más popular de Bel-Air reúne todos los requisitos para ser un modelo a seguir.
